Los habitantes del norte de India han estado luchando contra una implacable ola de calor que dura varias semanas y que ha obligado a cerrar escuelas en algunos lugares y ha aumentado el riesgo de insolación para los trabajadores que trabajan al aire libre.
El departamento meteorológico de la India espera que las altas temperaturas persistan en toda la región durante los próximos días y ha puesto a varios estados en alerta máxima.
Algunas partes de la capital de la India informaron hasta 49,9 grados Celsius (122 grados Fahrenheit) el martes, y la oficina meteorológica dijo que las temperaturas eran 9 grados más altas de lo esperado. Los estados cercanos de Punjab y Haryana también vieron aumentar las temperaturas, y un lugar en Rajasthan superó la marca de 50 C (122 F).
India declara una ola de calor cada vez que las temperaturas superan los 45 C (113 F).
Una estación meteorológica de Nueva Delhi alcanzó este miércoles 52,3 grados, un récord en la capital de la India.
La zona de Mungeshpur, en las afueras de la capital y fronteriza con el desértico estado de Rajastán, registró hoy según el Departamento Meteorológico de la India (IMD) esta temperatura prácticamente invivible.
A las altas temperaturas en Nueva Delhi se suma una alerta por la escasez de agua, que este miércoles movió al Gobierno capitalino a imponer restricciones a su suministro y desplegar equipos para controlar su uso.
El calor extremo en el norte de la India ha coincidido con unas elecciones generales de seis semanas, lo que aumenta los riesgos para la salud mientras la gente hace largas colas para emitir su voto. La votación finaliza el sábado.