La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha lanzado un aviso especial fenómenos meteorológicos adversos, un tipo de alerta que sirve para señalar que la meteorología puede afectar a la seguridad de las personas y a los bienes materiales de forma directa o indirecta.
El aviso consta de una información fija que incluye la fecha de inicio y fin, las zonas afectadas y el nivel de gravedad, entre otros datos. En este caso, la alerta que se ha activado este jueves y que durará hasta el sábado es por las altas temperaturas que va a dejar una masa de aire cálido que se ha desplazado hacia la península desde África.
Esta primera ola de calor de verano, que dejará máximas de hasta 44 grados, va a afectar en mayor medida a unas zonas del país que a otras. En algunas regiones se ha activado la alerta amarilla y en otras, la naranja. Pero, ¿qué significan estos valores? El amarillo implica que no existe riesgo para la población en general aunque sí para alguna actividad concreta, en este caso, la Aemet recomienda a los ciudadanos estar atentos al la predicción del tiempo y evitar las actividades al aire libre en las horas centrales del día. Por su parte, el aviso naranja indica que existe un riesgo meteorológico importante con cierto grado de peligro para las actividades usuales. En este caso, la recomendación de los meteorólogos es tomar precauciones, especialmente en las actividades habituales y al aire libre.
Este episodio de altas temperaturas afectará a casi todo el país. Sin embargo, las zonas más afectadas serán la mitad sur y el cuadrante noreste de la Península, donde se espera que se superen los 38 grados, llegando a alcanzar los 42 en zonas de los valles del Guadiana, del Tajo y del Ebro; e incluso los 44 grados en el Valle del Guadalquivir.
Los días álgido de la ola de calor son este jueves y el viernes, cuando los valores superiores a los 40 grados puedan darse de forma más extensa. De hecho, durante esta jornada las regiones en alerta son Andalucía, Aragón, Baleares, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cataluña, Extremadura, Comunidad de Madrid, Comunidad Foral de Navarra, País Vasco, La Rioja y Comunidad Valenciana.
El viernes se verá afectada casi toda la península y también Baleares. Será el día de mayor riesgo, ya que el naranja tiñe el mapa de avisos activos de la Aemet. Durante esta jornada será vital extremar las precauciones para evitar las consecuencias negativas para la salud de las temperaturas extremas.
La Aemet detalla que partir del sábado es probable una masa de aire atlántica más fresca dé lugar a un descenso moderado de las temperaturas en la vertiente atlántica peninsular, aunque se alcanzarán los 38 grados en la mitad sur peninsular y se podría llegar a los 40 en el valle del Guadalquivir.
En el valle del Ebro la incertidumbre es elevada, siendo lo más probable que se establezca el cierzo, por lo que el descenso térmico en el alto Ebro sería notable, aunque en el medio y bajo Ebro aún se podrían alcanzar los 40 grados, donde existe la posibilidad de tormentas por la tarde, lo que provocaría un descenso brusco de las temperaturas. En cuanto a la vertiente mediterránea, el sábado es el día álgido de la ola de calor en la zona, ya que el viento de poniente hará subir las temperaturas hasta alcanzar los hasta los 44 grados.
Sin embargo, durante el domingo se prevé que el descenso térmico, iniciado el sábado en la vertiente atlántica, se traslade al resto de la Península y a Baleares.
Las olas de calor son cada vez más frecuentes. Sin embargo, la AEMET confirma que aún no hay evidencia para sostener si cada vez son más graves o no, pero los picos de temperatura cada vez son más altos