Bolivia registra en lo que va del año un total de 3.872.498 hectáreas de bosques y pastizales destruidas por incendios, más que en todo el 2023, informó el ministro de Medio Ambiente y Agua, Alan Lisperguer. “La superficie preliminar que tenemos de afectaciones es de 1,5 millones de hectáreas en bosques y de 2,3 millones de hectáreas en pastizales”, señaló Lisperguer en conferencia de prensa.

El informe del ministerio detalla que las hectáreas quemadas corresponden a 1.531.992 de bosque y 2.340.506 de pastizales. La quema de bosques es una práctica ancestral en Bolivia con la que se prepara la tierra para la siembra que comienza entre abril y junio y se prolonga hasta octubre y noviembre.

El aumento en este tipo de incendios también coincide con una elevación de las temperaturas por el cambio climático, según información oficial. En el balance de diciembre, el ministerio reportó 3.508.033 de hectáreas de bosques y pastizales quemadas durante 2023.

Lisperguer informó que tres áreas protegidas están afectadas por incendios: el Parque Nacional de Cotapata, al norte del departamento de La Paz y de unas 65.000 hectáreas; el Parque Nacional Noel Kempff Mercado, en el departamento del Beni (noreste) y de 1,5 millones de hectáreas, y El Área Natural de Manejo Integrado San Matías, en el departamento de Santa Cruz (este) y de 2,9 millones de hectáreas.

Las densas humaredas han llegado a las capitales de cinco departamentos de los nueve del país, por lo que el gobierno suspendió allí las clases escolares presenciales, informó el ministro de Educación. El presidente boliviano, Luis Arce, informó a través de la red X que solicitó al Ministerio de Defensa la contratación de aviones cisterna para apoyar en la lucha contra los incendios.