
El ataque llega después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara esta semana que enviará “más armas” a Kiev para defenderse de los bombardeos rusos.
En total, el ejército ruso disparó 728 drones y 13 misiles, según la fuerza aérea ucraniana, que afirmó haber interceptado 711 drones y destruido siete misiles, sin especificar los daños provocados por los ataques.
“El objetivo principal del ataque fue la región de Volinia, la ciudad de Lutsk”, indicó la fuera aérea, que explicó que los ataques ocurrieron en “cuatro lugares”, sin más detalles.
En Kiev, la capital, una persona resultó herida y otras dos en la región de Zaporiyia, en el sur, según las autoridades locales.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, denunció “un ataque revelador” que muestra la negativa de Rusia a negociar un alto el fuego mientras el ejérico ruso sigue avanzando en el frente oriental.
Zelenski volvió a pedir “sanciones severas” contra Rusia y su economía, en especial el sector petrolero, “que ha estado alimentando la maquinaria de guerra de Moscú durante más de tres años”.